martes, 15 de febrero de 2011

PITADA A ROSA AGUILAR - 14-2-2011 Córdoba no para


 El número cuatro:

Para los pitagóricos, allá por la Grecia Clásica, era un número sagrado. La perfección.

Para el Régimen de la Junta, un socorrido pretexto para minimizar el escándalo de su labor cortijera cuando, debido a que llega a sede judicial, no se puede tapar la verdad y las crieturitas que votan PSOE se pueden dar cuenta de la caterva que mantienen con su voto. Mario Jimenez, a falta de mejor profesión conocida, profesional de los aparatos del Partido, se refirió a cuatro sinvergüenzas, cuando salió a la luz el "fondo de reptiles" (Chapeau para quien le puso ese nombre al fondo, no le sobra una letra).

Para UGT, atrofiada por años de práctica de la mendicidad en las puertas del Cortijo -deme argo pa comé zeñoriiito-, incapaz de disponer de discurso propio, incluso para un mal pretexto exculpatorio, calca el argumento de sus amos y dice que son "cuatro sinvergüenzas" cuando se destapa que la mujer de un responsable de UGT de Jaén, que ha tenido que dimitir ante tamaña bola, anda salpicada judicialmente por los EREs del pasteleo...

Para los que están en contra del Decreto, y muy especialmente los de Córdoba, el número cuatro es la unidad mínima para montarle una bulla a cualquier jerarca del Régimen. Son cuatro gatos los que, con todas sus fuerzas, le sacan las vergüenzas a Rosa Aguilar en esta ocasión, pero no les importa. Porque en esta protesta, el número llega a ser lo de menos, porque lo importante es la calidad del mensaje y de las gentes que no saben lo que es beneficiarse de una liberación sindical, ni del que-hay-de-lo-mío al repartir la jugosa subvención entre los amiguetes a sabiendas de que luego te van a pedir pocos papeles sobre en que lo has gastado y, por supuesto, cuatro gatos que, en lo que dure este Régimen, van a tener que andar bien derecho en su trabajo y no van a beneficiarse de nada que pueda darle graciosamente un responsable Cortijero.

No llevan caretas y no pueden esconderse en la multitud. Son Individuos libres que se señalan ante un Régimen que solo exige mediocridad. Son lo mejor de la casa.



Como dice nuestra arenga de cabecera, la que da título a este blog: "Ni un hombre más, si estamos señalados para morir somos suficientes para pérdida de nuestro país y, si vivimos, cuantos menos seamos, mas grande será el honor"

Dejemos a los mediocres la exigencia de un mínimo quorum para manifestarse, trasladando a otros dias las manifestaciones cuando ven que solo van a ir -y con dificultad- sus liberados sindicales, porque saben con certeza que nunca la cualidad de su protesta podrá sustituir al número de manifestantes.